Los hombres que ejercitaban dos horas o más por semana al inicio del estudio eran un 25 por ciento menos propensos a tener dolor en la espalda baja 11 años después y un 20 por ciento menos propensos a sentir dolor de cuello u hombros, a diferencia de los sedentarios.
Científicos en Estados Unidos presentaron un nuevo tratamiento para ayudar a las personas con problemas para dormir: una gorra que enfría el cerebro durante el sueño.