De acuerdo a los investigadores, los jugadores de 1,70 metros de estatura tienen más posibilidades de pasar inadvertidos que un jugador de 1,90 metros. En situaciones poco claras a los más altos se los sanciona más seguido que a los bajos, indica el estudio, que se publicará en detalle en la edición de febrero del Journal of Sport & Exercise Psychology.
News and Innovations in Health and Quality of Life