Skip to main content

Música para un cerebro saludable

Los beneficios que aporta aprender a tocar un instrumento en el cerebro se mantienen a pesar de que, si tras la infancia, se abandona la práctica

Por JOSÉ A. RODRÍGUEZ 22 de julio de 2012 Estudiar música durante la infancia ayuda a que se formen conexiones alternativas en el cerebro de los niños. Un factor que, además, permite que mejore el rendimiento cognitivo en otros ámbitos, aparte del musical. Además, una reciente investigación señala que las clases de música en la infancia pueden convertirse en una de las mejores inversiones para la salud cerebral del futuro anciano y compensar la pérdida cognitiva propia del envejecimiento. En este artículo se detalla por qué recibir clases de música en la infancia ayuda a que el futuro anciano disfrute de un mejor funcionamiento cognitivo. Tweet Numerosas investigaciones han demostrado que escuchar música durante la infancia o recibir clases de música tiene un importante efecto positivo para el desarrollo cognitivo y social de los más pequeños. Un estudio realizado por científicos de la Universidad Northwester, en EE.UU., mostró que la formación musical genera conexiones neuronales que mejoran otros aspectos de la comunicación. Por este motivo, los niños que estudian música tienen un vocabulario más amplio y una mejor capacidad de lectura. Beneficioso para el cerebro Pero recibir una formación musical durante la infancia puede tener beneficios también muchos años después. Según un análisis realizado por psicólogos del Centro Médico de la Universidad de Kansas (EE.UU.), y publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría, recibir clases de música en la infancia ayuda a que el futuro anciano disfrute de un mejor funcionamiento cognitivo. El estudio musical ayuda a crear conexiones alternativas en el cerebro que permiten compensar la pérdida cognitiva propia de la vejez Para este estudio, los investigadores distribuyeron a 70 personas de entre 60 y 83 años de edad en tres grupos en función de su experiencia musical. Uno de los grupos era el de las personas que no habían recibido ningún tipo de formación musical. Otro estaba formado por mayores que habían empezado a estudiar música en la infancia y habían recibido formación durante menos de nueve años. Y en el tercer grupo estaban los ancianos que habían estudiado música como mínimo diez años. Todos los participantes contaban un nivel de estudios y un estado de forma física similar y no tenían signos de sufrir la enfermedad de Alzheimer. Además, quienes habían recibido algún tipo de formación musical, habían empezado a estudiar música hacia los diez años de edad, aproximadamente. En cuanto al tipo de instrumentos, más de la mitad habían recibido clases de piano, mientras que casi una cuarta parte de los participantes habían aprendido a tocar instrumentos de viento. Y varios se habían formado en percusión. Con música, un cerebro con más memoria Los participantes tuvieron que realizar tests de rendimiento cognitivo. Los investigadores querían evaluar funciones cognitivas que suelen disminuir con la edad y que empeoran cuando se sufre algún tipo de demencia. Los ancianos que había recibido algún tipo de formación musical obtuvieron mejores resultados que los que no la habían recibido. Asimismo, las personas que tenían más años de formación musical fueron las que, en general, obtuvieron mejores resultados, sobre todo, en las pruebas de memoria visual, en las de nombrar objetos y en flexibilidad cognitiva (la capacidad de la mente para adaptarse a la nueva información). Como señala Brenda Hanna-Pladdy, autora principal del estudio, "realizar una actividad musical durante toda la vida es un ejercicio cognitivo estimulante que ayuda a que el cerebro se enfrente mejor a los problemas del envejecimiento. Asimismo, como el estudio de un instrumento musical requiere años de práctica, seguramente favorece la creación de conexiones alternativas en el cerebro que permiten compensar la pérdida cognitiva propia de la vejez". Para un cerebro sano, más años de educación musical A la vista de los resultados de este estudio, no es necesario tocar un instrumento toda la vida para beneficiarse de las lecciones musicales recibidas durante la infancia. La mitad de los participantes en la investigación que habían percibido una formación musical hacía años que no practicaban. Y obtuvieron los mismos buenos resultados que las personas que habían estado tocando toda su vida. Así que, como opinan los investigadores, parece ser que son más importantes los años de educación musical recibidos en la niñez que continuar tocando un instrumento toda la vida. Otros beneficios de la formación musical durante la infancia Más allá del aumento del rendimiento cognitivo en diversos ámbitos, aprender música durante la infancia ofrece otra serie de beneficios a nivel psicológico y social: ayuda a mejorar la capacidad de concentración. los niños que tocan en bandas u orquestas aprenden a trabajar en equipo, lo que fomenta valores como la cooperación y la solidaridad. la música es una actividad placentera que, además, puede ser muy relajante. estudiar un instrumento musical fortalece la autoestima.
http://www.consumer.es/web/es/salud/prevencion/2012/07/22/210862.php?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=eroski-consumer%2Fsalud

Comments

Popular posts from this blog

Light Therapy holds promise as a treatment for Alzheimer's Disease

A new article, conducted by Lili Zang and colleagues from Weifang Medical University School of Nursing in Shandong Province, China, discusses a meta-analysis of 15 high-quality trials that investigated the impact of light therapy on individuals with Alzheimer’s disease (AD). The meta-analysis included 598 patients with mild to moderate Alzheimer’s disease, and it covered 15 randomized controlled trials conducted in seven different countries. Those trials were published between 2005 and 2022. Sleep Improvement Light therapy led to significant improvements in several sleep measures. It notably enhanced sleep efficiency, increased interdaily stability, and reduced intradaily variability, all of which are indicators of better sleep quality. Light therapy was associated with a reduction in agitation, depression, and caregiver burden among individuals with Alzheimer’s disease. A significant advantage over usual care was shown in reducing the severity of psychobehavioral symptoms, as assessed...

Los no fumadores engordan menos

Un nuevo estudio relaciona el tabaquismo con la ganancia de peso, y concluye que las personas fumadoras activas, no sólo las que lo dejan, engordan más que las no fumadoras. Después de cuatro años de análisis en la Universidad de Navarra, las personas que menos engordaron fueron las que nunca habían fumado.

Lacticaseibacillus rhamnosus may help in periodontal disease

A new study explores how a specific probiotic, Lacticaseibacillus rhamnosus GG (LGG), might help improve the regeneration of bones in the gums affected by periodontal disease, especially in the presence of high cholesterol levels (hyperlipidemia).  Periodontal disease can lead to the loss of bone in the jaw, making it challenging for the bone to regenerate. The researchers used a rat model with conditions mimicking periodontal disease, high cholesterol, and a defect in the gums. The rats were given LGG for six weeks, and then various measurements were taken after sacrificing the rats to understand the effects. They found that the bone density, volume, and thickness in the affected area increased after the rats were given LGG.  Interestingly, these improvements were not due to direct effects on the oral bacteria but were linked to changes in the gut microbiota.  When fecal matter containing the altered gut bacteria from LGG-treated rats was transplanted into other rats, si...