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Las uvas reducen los factores de riesgo de enfermedades cardiacas y diabetes, según un estudio con animales en la UM

Las conclusiones muestran que el consumo de uvas baja la presión sanguínea, mejora la función cardiaca y reduce otros factores de riesgo de enfermedad cardiaca y síndrome metabólico

26 Abril, 2010 en Inglés. ANN ARBOR, Michigan.— ¿Es posible que el consumo de uvas haga más lenta para muchas personas en Estados Unidos la secuencia de alta presión sanguínea y resistencia a la insulina que conduce a la enfermedad cardiaca y la diabetes Tipo 2?

Los científicos del Sistema de Salud de la Universidad de Michigan están analizando señales del efecto de las uvas en la reducción de los factores de riesgo relacionados con la enfermedad cardiovascular y el síndrome metabólico. Se cree que los efectos se deben a compuestos fotoquímicos –antioxidantes que ocurren naturalmente — y que están incluidos en las uvas.

Las conclusiones de un nuevo estudio realizado con animales se presentarán hoy en la Convención de Biología Experimental en Anaheim, California, y muestran los resultados alentadores de una dieta enriquecida con uvas en la prevención de los factores de riesgo del síndrome metabólico, una condición que afecta a unos 50 millones de personas en EEUU y es, a menudo, precursora de la diabetes Tipo 2.

Los investigadores estudiaron el efecto de las uvas comunes de mesa (una mezcla de uvas verdes, rojas y negras) combinadas en forma de polvo e integradas en las dietas de ratas de laboratorios como parte de una dieta de estilo estadounidense con elevado contenido de grasas. Todas las ratas usadas fueron de una cepa de investigación propensa a tener exceso de peso.

Los investigadores efectuaron numerosas comparaciones entre las ratas que consumían la dieta enriquecida con uvas y las ratas que no recibieron el polvo de uvas. Luego agregaron calorías y azúcares al grupo de control para equilibrar las calorías y azúcares extra obtenidos de la dieta con uva en polvo.

Después de tres meses las ratas que recibieron la dieta enriquecida con uva mostraron presión sanguínea más baja, mejor función cardiaca y menores indicadores de inflamación en el corazón y la sangre que las ratas que no recibieron uva en polvo. Las ratas en la dieta con uva tuvieron, asimismo niveles más bajos de triglicéridos y una mejor tolerancia a la glucosa.

Los efectos se observaron aún cuando los animales alimentados con uva no tuvieron cambios en el peso corporal.

En términos generales los investigadores señalan que el estudio de muestra que una dieta enriquecida con uvas puede tener efectos amplios sobre el desarrollo de la enfermedad cardiaca y el síndrome metabólico y los factores de riesgo que les acompañan.

“El razonamiento posible detrás de la disminución del síndrome metabólico es que los fotoquímicos actúan protegiendo a las células del corazón de los efectos dañinos del síndrome metabólico. En las ratas , la inflamación del corazón y la función cardiaca se mantuvieron mucho mejor”, dijo Steven Bolling, cirujano cardiaco en el Centro Cardiovascular de la UM y director del Laboratorio de Investigación de Cardioprotección de la UM.

Los investigadores buscaron asimismo señales de inflamación, daño oxidativo y otros indicadores moleculares de estrés cardiaco. Una vez más, las ratas que consumieron uva en polvo tuvieron niveles más bajos de estos marcadores que las ratas que no recibieron uva.

No hay una forma bien aceptada de diagnosticar el síndrome metabólico que es, en realidad, un conjunto de características: excesiva grasa en el abdomen (para los hombres una cintura que mide más de 100 centímetros y para las mujeres una cintura que mide más de 88 centímetros); elevado nivel de triglicéridos que puede conducir a la acumulación de placa en las paredes arteriales; alta presión sanguínea; reducida tolerancia a la glucosa; y nivel elevado de la proteína reactiva C, un indicador de inflamación en el cuerpo.

Las personas con síndrome metabólico tienen un riesgo mayor de enfermedad cardiovascular y de diabetes Tipo 2.

Pero el estudio indica que es posible que el consumo de uvas cambie la secuencia que lleva a la enfermedad cardiaca prolongando el tiempo entre la aparición de los síntomas y el diagnóstico.

“La reducción de estos factores de riesgo puede demorar el comienzo de la diabetes o la enfermedad cardiaca, o puede disminuir la gravedad de las enfermedades”, señaló E. Mitchell Seymour, investigador principal y director del Laboratorio de Investigación de Cardioprotección de la UM. “En última instancia puede disminuir la carga que estas condiciones, cada vez más comunes, representan para el cuidado de la salud”.

A las ratas se les administró cada día el mismo peso de comida, y el polvo de uvas era el 3 por ciento de la dieta. Aunque el estudio actual fue financiado, en parte, por la Comisión de Uva de Mesa de California, que también proveyó la uva en polvo, los investigadores señalan que la comisión no desempeñó papel alguno en el diseño o la conducción del estudio, el análisis de los resultados o la preparación de su presentación.

La investigación de las uvas y otras frutas que contienen altos niveles de fotoquímicos antioxidantes continúa mostrando promesas. La UM proseguirá su investigación este verano cuando inicie la prueba clínica para determinar el impacto del consumo de productos de uva sobre los reactores de riesgo cardiaco.

“Aunque no existe una correlación directa particular entre este estudio y lo que deberían hacer los humanos es muy interesante postular que una dieta con un contenido mayor de frutas ricas en fotoquímicos, tales como las uvas, puede beneficiar a los humanos”, dijo Bolling.

Bolling añadió que las personas que quieran bajar su presión sanguínea, reducir su riesgo de diabetes o ayudar a que un corazón debilitado mantenga tanta fuerza de bombeo como sea posible deberían seguir el consejo tradicional y ya probado de una dieta saludable con bajo nivel de grasas saturadas, grasas trans y colesterol, un peso saludable y un incremento de la actividad física.
http://www.umich.edu/Es/news/10/pr100426.php
Contacto (español): Vivianne Schnitzer
Teléfono: (734) 615-1563

Contacto (inglés):Tara Hasouris ó Shantell M. Kirkendoll
Teléfono: (734) 764-2220

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